segunda-feira, junho 06, 2005

Tomado de empréstimo no Abrupto de JPP (J.Albergaria)

"La biblioteca existe ab aeterno. De esa verdade cuyo corolario inmediato es la eternidade futura del mundo, ninguna mente razonable puede dudar. El hombre, el imperfecto bibliotecario, pude ser obra del azar o de los demiurgos malévolos; el universo, con su elegante dotación de anaqueles, de tomos enigmáticos, de infatigables escaleras para el viajero e de letrinas para el bibliotecario sentado, sólo puede ser obra de un dios. Para percebir la distancia que hay entre lo divino y lo humano, basta comparar estos rudos símbolos trémulos que mi falible mano garabatea en la tapa de un libro, con las letras orgánicas del interior: puntuales, delicadas, negrísimas, inimitablemente simétricas."

(Jorge Luis Borges)